viernes, 28 de abril de 2017

Vida en la granja Cap.7

¡Feliz viernes pichones! ¿Cómo estáis?

Yo sigo de obras, agobiada y con polvo por todos lados. Es bastante estresante, ya que nos habían dicho que mañana las terminarían y solo faltarían las puertas, a las que les queda un mes para llegar. Pero visto lo visto, yo no creo que mañana me terminen dos baños, los arreglos que faltan y que lo limpien todo. ¡NO ME LO CREO! De hecho ,estoy segura de que pasará algo. ¿Nos apostamos algo? En fin, hoy al menos me han terminado de embaldosar la chimenea, que era una cosa importante. Pero el avance cuesta verlo, cuando tienes taaaaaanto por en medio. Resulta frustrante, pero bueno.


Después de muchos días sin subir historia (lo siento, pero ando liadísima con todo), aquí os traigo un nuevo capi. ^_^¡Qué lo disfrutéis!


VIDA EN LA GRANJA

Capítulo 7



Al llegar a casa, Marta se tiró en la cama y rompió a llorar. No por la pena, si no por la rabia de lo que había pasado. ¿Qué culpa tenía ella de que Javi le hubiese hablado y de que esa zorra fuese su novia? Ninguna. Estaba cabreada, indignada. Quería matar a Larissa. O "La zorra", como la había apodado en ese mismo instante.

Pasó la noche en vela, arreglando su casa que poco a poco tomaba forma. La cabeza le martilleaba, tenía ganas de vomitar y el cabreo no se le pasaba. Le dio la madrugada y salió a tomar el aire. El amanecer allí, era hermoso. Limpio, sin nada delante. Su casa daba directamente a un lago que estaba despejado, por lo que todo brillaba. Aunque ella no veía el lago, debido a la vegetación, estaba ahí, solo un par de árboles lo tapaban y por algún resquicio, podía verse el agua. El sol comenzaba a intensificarse y ella estaba agotada. Cogió su taza de café, su cigarro y se sentó en el porche a llorar. ¿Porqué le estaba pasando eso a ella? ¿Qué había hecho para merecerse tanto sufrimiento? No era una mala chica, ayudaba a la gente aunque no la conociese. Y sin embargo, su karma, parecía no existir.

Después de mucho rato, mirando a la nada. Una furgoneta vieja y casi sin color, aparcó frente a su casa derrapando. El conductor no parecía estar muy cuerdo. Y ahí vio como Javi bajaba, borracho como una cuba.

- ¿Se puede saber que demonios haces aquí? ¿Dónde está la zorra de tu novia? ¿Guardándote los huevos que no tienes? - Lo fulminó.

- Vengo en son de paz, no te pongas así... -Se tambaleó y se apoyó en el coche. - Solo he venido a pedirte perdón por lo de Lariiiiisssaaaa... -Alargaba tanto las palabras, que costaba entenderle.

- No quiero tu perdón. No me sirve de nada para recuperar MI trabajo. -Espetó cabreada. - ¡Y no deberías conducir! Llamaré a tu madre para que mande a alguien a buscarte. ¿ES QUE QUIERES MATARTE? Imbécil. - Se metió en la casa y cogió su teléfono sin esperar respuesta de Javi.

- ¡No llames! -Gritaba desde fuera. -¡Estoy bien!

- ¡Que te folle un pez espada y te duela mucho! ¡GILIPOLLAS! - Dijo mientras marcaba el número de la casa de Javi. - ¿Lara? Soy Marta, tengo a tu hijo en la puerta de mi casa como una cuba y quiere conducir. ¿Podéis venir a buscarlo? No lo aguanto.

- ¿Eh? Pero ahora no estamos en casa, cariño. ¿Te importa retenerle solo un par de horas? En cuanto volvamos iremos a por él.

- No me hace gracia, pero lo haré por ti. -Tras despedirse, colgó. Estaba que echaba humo. - Tú, monigote sin huevos, entra y vete a dormir la mona al sofá.

- No quiero dormir. ¿Tienes whiiiisky? -Sonrió.- ¿Eso significa que me has perdonado? - La miró tambaleándose y entrando a la casa.

- Para ti, NO. -Respondió tajante.

- ¿Por qué eres tan arisca  conmigo? No es culpa mía... -Se tiró en el sofá y dos segundos después, roncaba como una marmota.

- Desde luego, no entiendo porque tengo que aguantar esto. Karma, si existes, más vale que tenga una buena recompensa. -Bufó y se fue a dar una ducha. La necesitaba de forma urgente. Se encontraba cansada y tenía un hambre canina.

Un par de horas más tarde, a eso de diez de la mañana, Marta estaba haciendo un desayuno decente. La casa olía a bacon, huevos y tostadas. Y eso despertó a un Javi hambriento, que en ese momento, no sabía donde se encontraba.

Ella estaba en la cocina, con la radio puesta, con unos pantalones muy cortos y una camisa atada al abdomen, la típica a cuadros rojos. Era todo un paisaje digno de admirar. Aunque estaba tan metida en su mundo, que no se daba cuenta de la mirada de Javi. Hasta que se giró y le vio parado en la puerta de la cocina.

- Hola...

- Así que al fin te has despertado. Tus padres no tardarán en venir a recogerte. No puedes conducir así y yo no puedo llevarte. -Le puso un plato y se sentó sin mirarle. - Deberías comer algo. Hueles como si te hubieses bebido un estanque de agua podrida, así que por tu estado, probablemente, no cenaste anda anoche.

- Eres muy observadora. -Él no podía quitarle los ojos de encima. Y ella, evitaba mirarle...



Continuará...

14 comentarios:

  1. Bueno no te preocupes, por lo menos le avanzaron xD Buen capitulo :D ¡Saludos!

    ResponderEliminar
  2. La negativo de Larissa no es su profesión, sino su personalidad.
    Y Marta tiene razón en quejarse.
    Bien contado

    ResponderEliminar
  3. Ya has visto la luz con las obras! Me alegro un montón.
    Cada vez que nos pones gifs del Manganiello y luego leo la historia...omg... jajaja
    Un besazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Siiii! ¡Queda menos!

      Es que Joe... Es mucho Joe jajajaja

      Eliminar
  4. Jajaja me encanta!! Marta tiene unos puntazos...es super descarada!! Un besoteeee fuerte

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que Marta tiene un mundo mental, muy similar al mío jajajaja

      Eliminar

  5. OH MY GOD!!! Esto es hilarante: ¡Que te folle un pez espada y te duela mucho! Me has matao de risa. Marta se trae su genio, pero ella tendra sus razones. Muy temperamental la chica.
    Bso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Uffff, esa frase la digo tanto... Desde hace años. Alguna vez tenía que salir en una historia mía jajajajaj

      Un besoteee

      Eliminar
  6. Me gusta tu expresión del pez espada, yo a veces la uso pero, digo pez polla no se porque jajaja.
    Nena otro, otro... tengo ganas de leer más sobre esta historia, espero que sea larguita que lo bueno siempre termina rápido.

    Te como!

    ResponderEliminar
  7. ¡Qué diálogos tan divertidos, Mia! Me parto de risa, de verdad...
    ¡Un abrazote!

    ResponderEliminar