Ejercicio #21 y... ¡LLEGADA DEL OTOÑO! ¡WIII!

¡Holaaaaa!

Jo,lo de ayer fue terrible. No esperaba que al volver de comer,me sintiese tan mal. (Sorry). Y pensaba que hoy seguiría igual,pero por suerte,no ha sido así. Si me llego a encontrar igual que ayer,justamente hoy,me muero. ¿El porqué de esta foto? Pues porque hoy justo hago seis añitos con mi chico. *Saltitos de emoción en el sofá* Obviamente,este año tenemos un regalazo,nuestro pequeño Ian,que tenemos unas ganas de que salga ya... *Suspiro*. Y lo que nos queda. Por eso ayer estaba tan chof. ¿Cuántas veces la ley de Murphy nos da un sopapo y nos jode los planes? Siempre. Pero por suerte hoy me encontraba algo mejor y tras tomarme un acuarius,el estómago se me ha asentado. ¡YUJU!

Hemos ido a un restaurante cerca de la playa. En el Portixol. Una zona muy bonita de Mallorca,que por las noches suele estar llenísima,por eso hemos ido a comer y no de cenita romántica. Debo decir,que después de haber estado malita ayer,hoy me he zampado dos entrantes y un principal. He comido más por los ojos que por la boca,ya que el plato principal me ha parecido bastante avinagrado. Y una carrillera no tiene que ser avinagrada. Supongo que también es porque mis papilas gustativas están revueltas. Porque realmente olía muy bien,pero bueno...

La verdad,hoy me apetecía salir,aunque he tenido que ponerme mil potingues en la cara,ya que aunque no se distingue en la foto (bendito maquillaje),tengo la cara hecha un cristo. Y las gafas siempre esconden esas muchas imperfecciones. Así que... *Risas* Bueno,al final en vez de irnos a dar un paseo,después de comer hemos vuelto a casa. Porque pensábamos que la llegada del otoño se haría notar,pero no.

Casi morimos calcinados bajo el sol mallorquín. En serio... ¿Porqué no desaparece ya? (Buaaa) No me gusta el verano,no me gusta sudar,en general,no me gusta ni el sol. Así que,esperaba que hoy hiciese mal día,que lloviese y esas cosas,pero nada. Dicen que mañana si que lloverá y habrá tormenta. Cruzo los dedos porque así sea,porque ya no soporto este calor. Además,que yo duermo mejor con lluvia y tengo ganas de que se acabe la sequía. En fin,paro ya que si no... Me enrollo como una persiana. Vamos a por el ejercicio de hoy,que por suerte estos ejercicios no son de reto y puedo hacerlos cuando quiera,menos mal. Odio no escribir cuando toca.

El reto de hoy,va sobre encontrar unos zapatos que no son tuyos en casa... Veremos que sale. Mas info: click,click,click.


Los zapatos


Me desperté con una resaca tremenda. La verdad es que a mis treinta años,no debí salir entre semana sabiendo que debía despertarme temprano. Tenía el cuerpo entumecido,como si hubiese estado dándole al tema toda la noche. Un momento... ¿Lo había hecho? Me levanté de la cama y vi unos zapatos de piel,muy limpios. De pronto la ducha se encendió y escuché a alguien canturrear. a saber a quién me había llevado la noche anterior a casa. Me levanté envuelta en la sábana y miré los zapatos,ese hombre debía estar muy bien dotado,porque los zapatos eran enormes. Me escocía ahí abajo y para colmo,tenía agujetas. ¿Qué había hecho? Me toqué la cabeza intentando recordar y comencé a ver flashes,aunque no recordaba la cara,pero como sabía que estaba en mi baño,entré sin vergüenza. ¡Y madre mía lo que vi! No pude mirarle a la cara... ¡Vaya tranca! ¡Triunfé! La papelera tenía como diez condones usados. ¿Qué tipo de máquina sexual había escogido?

Sin embargo,cuando levanté la vista tras ver un tatuaje que me resultaba familiar en el brazo,confirmé mi sospecha: ¡MI JEFE! Sentí vergüenza,pero por primera vez... Podría llegar tarde al trabajo y nadie me diría nada. La diversión debía continuar.